sábado, octubre 14, 2006

Greuges

La excelentísima Comunidad madrileña se retrae en la política común de vacunas y la valenciana acusa a la UE de convertirla en chivo expiatorio aunque culpable, idéntico argumento que la CAV en la vacaciones fiscales tan disolutas e insolidarias. Aunque ésta última pedía igualdad de trato. Y se lo han dado vía Azores (no podían ser tan malas). Las autoridades levantinas piden exención delatora y chantajista.

Por lo demás,
¡viva la Pepa! Y viva Cartagena

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